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Formación de galaxias: desentrañando los secretos de cómo evolucionan las galaxias

El Grupo 3 de investigación de CATA, “Galaxias”, investiga cómo estos grandes sistemas se forman y evolucionan a través del tiempo cósmico desde los albores del Universo hasta nuestros días, usando los grandes observatorios para estudiar cómo interaccionan sus distintas componentes: estrellas, polvo, gas y agujeros negros.

Estudiar las galaxias cuando el universo tenía solo el 10% de su edad actual, es el objetivo de  “CRISTAL”, el primer Proyecto a Gran Escala dirigido por científicos chilenos en el Observatorio ALMA, con más de 140 horas de observación adjudicadas. La meta no es otra que entender cómo se formaron estas estructuras desde hace unos 10 mil millones de años, evolucionando hasta formar las galaxias actuales, en particular nuestro “hogar”: la Vía Láctea.

Estudios como este son parte del trabajo que desarrollan los astrónomos y astrónomas del grupo de investigación 3 del Centro de Astrofísica y tecnologías Afines (CATA), “Galaxias”, quienes se reunieron recientemente en la Universidad Diego Portales (UDP) para discutir los principales desafíos y proyectos que deberán abordar a futuro como grupo de investigación de vanguardia en astronomía y astrofísica. Además de proyectos como CRISTAL, el grupo investiga las características de los Núcleos Galácticos Activos (AGNs por sus siglas en Inglés) y los enormes agujeros negros que los componen.

Felipe Barrientos, director del Instituto de Astrofísica UC e Investigador Principal (PI) del área 3 de CATA, explica que “estamos estudiando la evolución de las galaxias desde que son muy jóvenes. Tenemos un grupo muy cohesionado, con muchos investigadores e investigadoras jóvenes, que llevan adelante estudios muy interesantes para esta área”.

Uno de estos proyectos es CRISTAL. El astrónomo del Departamento de Astronomía de la Universidad de Concepción e investigador CATA, Rodrigo Herrera-Camus, que participa de esta iniciativa para observar galaxias muy antiguas, afirma que será muy relevante porque “utiliza no solo datos de ALMA, sino que también combina datos de los telescopios espaciales Hubble y James Webb. Esto nos permitirá obtener una visión bastante completa e integral de las galaxias”.

Roberto Assef, del Núcleo de Astronomía de la Universidad Diego Portales (UDP) e Investigador Principal (PI) del área 3, destaca el gran rango cósmico que se estudia en este grupo de investigación. “Esto significa que tenemos que investigar tanto las galaxias locales, como aquellas que se encuentran a grandes distancias, hasta llegar a las primeras galaxias del Universo. Tenemos un grupo que está haciendo ciencia muy diversa, en muy distintas áreas de evolución de galaxias”, señaló.

Un ejemplo de esta diversidad es el trabajo de Dejene Zewdie, estudiante de doctorado que trabaja con el profesor Assef en la UDP, quien utiliza imágenes ópticas profundas como parte de su investigación. La meta de estos estudios es investigar los ambientes en donde viven las galaxias con los núcleos activos oscurecidos más luminosos en el Universo, las Hot Dust Obscured Galaxies o Hot DOGs. 

Durante el encuentro también participaron estudiantes, como es el caso de la alumna de cuarto año del Instituto de Astrofísica UC, Fernanda Muñoz, quien valoró la oportunidad de estar participando en encuentros presenciales para conocer las investigaciones que se realizan en el área de galaxias. “Ha sido muy interesante ver las distintas presentaciones y aprender más sobre la diversidad de investigaciones que se están haciendo”.

Una diversidad que crecerá todavía más cuando entre en funciones el Observatorio Vera Rubin, actualmente en construcción en Cerro Pachón a 2.600 metros de altura en la Región de Coquimbo: contará con un telescopio de clase mundial de 8 metros, acoplado a una cámara de 3.2 gigapixeles: la cámara digital más grande del mundo jamás fabricada para astronomía óptica. Aunque se espera entré en operaciones en 2024, el grupo de investigación 3 de CATA ya se está preparando para poder aprovechar todos los datos que empezará a generar este fascinante telescopio.

Crédito Foto: Erika Labbé